Perú, 9 febrero 2022.-
El ministro de Justicia de Perú, Aníbal Torres, asumió como cuarto primer ministro del país en poco más de seis meses, mientras el presidente Pedro Castillo intenta restaurar la estabilidad después de semanas de agitación política.
Torres, de 79 años, es un abogado independiente que no pertenece a ningún partido político. Formó parte del equipo jurídico que luchó contra las denuncias de fraude de la oponente de Castillo, Keiko Fujimori, durante las elecciones del año pasado. Se ha pronunciado a favor de convocar un referéndum para cambiar la Constitución.
La primera ministra Mirtha Vásquez renunció a fines de enero, aduciendo diferencias con otros miembros del Gobierno. Su reemplazo, Héctor Valer, duró menos de una semana en el cargo y renunció tras acusaciones de violencia doméstica, que él niega.
Como ministro de Justicia, Torres generó polémica al anunciar que el expresidente Alberto Fujimori, padre de Keiko Fujimori, será trasladado de una cárcel especial a una común cuando su estado de salud lo permita.
El execonomista del banco central Oscar Graham, popular entre los inversionistas, permanecerá como ministro de Economía.
Carlos Palacios, miembro del partido socialista Perú Libre de Castillo, juró como nuevo titular del Ministerio de Energía y Minas, mientras que el ministro de Salud, Hernando Cevallos, quien supervisó un aumento de cinco veces en el número de peruanos vacunados contra el covid-19, dejó el gabinete. Los ministros de Transporte, de Cultura y del Interior fueron ratificados en sus cargos.
Castillo ha realizado cambios en su gabinete en repetidas ocasiones desde que asumió el cargo en julio pasado, mientras trata de apaciguar a los socialistas de su partido Perú Libre al tiempo que mantiene una relación de trabajo con el Congreso.
Castillo se ha visto afectado por una serie de crisis en las últimas semanas, incluido un derrame de petróleo, la renuncia de su ministro del Interior, y una ola de delincuencia que llevó a su Gobierno a declarar estado de emergencia en Lima. En diciembre, sobrevivió a un intento de destitución por parte de los legisladores de la oposición.
Torres es una figura controvertida por haber despedido a un fiscal general que presentó una denuncia ante la Fiscalía sobre Castillo. El nombramiento de otro polémico gabinete es un claro mensaje de que el presidente no está dispuesto a mejorar la calidad de su equipo, y no será bien recibido por la opinión pública ni por los legisladores, lo que aumentará el apoyo para intentar destituirlo, según señaló Alexandra Ames, analista política de la Universidad del Pacífico en Lima.
La economía ha tenido un buen desempeño a pesar de la volatilidad política y el año pasado creció al ritmo más rápido de cualquiera de las principales naciones latinoamericanas, según estimaciones de economistas encuestados por Bloomberg. Se prevé que el banco central aumente las tasas de interés por séptimo mes consecutivo esta semana, para frenar la presión inflacionaria a medida que la economía se recupera de la pandemia.
