Denuncian a SQM Litio de sobre explotación de las aguas.
Calama, 13 octubre 2025.- 21:14 PM.-
Un grupo de dirigentes de comunidades indígenas de la comuna de San Pedro de Atacama tras realizar una larga caminata desde el pueblo hasta Calama por protección al agua y napas subterráneas de la provincia de El Loa, se dirigío hasta la Delegación Privincial para hacer entrega de una carta en donde dejan en claro manifiesto de su negativa del trabajo extractivo que realizan las minera, en especila SQM en la extracción del Litio.
El presidente de una de las comuniodades manifestantes Alex Ramos González se refirió a esta manifestación que emnpezó ya hace bastante meses atrás, y como medida de coronación marcharon desde el sábado hasta este domingo desde San Pedro de Atacama hasta Calama donde se manifestaron al respecto de los permisos ambientales otorgados a SQM para la sobre explotación del principal recurso de este desierto.
El domingo tras marchar por calles de Calama llegaron hasta el edificio corporativo de Codelco como medida sinbólica para manifestarce sobre el tema que a ellos les preocupa.
«Lo que nosotros buscamos es que la Consulta Indígena quede nula, que se haga una Consulta Indígena con las normas y estándares internacionales» acalró Ramos.
Entregaron un documento en la Delegación que fue recibida por el abogado de esta repartición.
EL DOCUMENTO
Declaración conjunta de organizaciones de protección y defensa del territorio en protesta por las políticas mineras que el Estado de Chile impone en la Región de Antofagasta.
Desde hace miles de años los pueblos de la costa y los territorios altoandinos se han conectado, manteniendo prácticas culturales propias de los pueblos que habitaron y habitan el desierto de Atacama. Hoy desde la planicie litoral hasta la puna, la Región de Antofagasta se ha convertido en una gran ZONA DE SACRIFICIO. La industria extractivista, su interminable necesidad de energía y agua se han tomado los territorios, bajo una política que supuestamente busca el desarrollo económico del país, pero que empobrece a la naturaleza del desierto, sus costas, humedales, lagunas, ríos superficiales y subterráneos. La destrucción de estos ecosistemas incide en la desaparición de la flora y fauna extremófilos y de todo ser vivo en el desierto, enfermando también a la población con arsénico, plomo y diversos metales pesados microparticulados presentes en agua, aire, suelo y en los alimentos que crecen en la región y que se bioacumulan en nuestros cuerpos.
Es de conocimiento público las altas tasas de cáncer en la región, el creciente índice de neurodivergencias, enfermedades reumatoides, al corazón, enfermedades de salud mental y la mala calidad del agua, aire y suelo, por exceso de metales pesados. Una población enferma no es desarrollo. Sabemos que la minería no se detendrá, pero exigimos que las políticas mineras del Estado de Chile no estén al servicio de las transnacionales e intereses privados que profundizan la desigualdad, sabemos que gran parte de los minerales que se extraen de la región y del país, van a la creación de armas y tecnologías de guerra. Una explotación indiscriminada que sólo deja muerte a su paso.
Este 12 de octubre, que mal han llamado los estados y sus sistemas educativos obsoletos como el “Encuentro de dos mundos”, es una fecha que resignificamos, conmemorando a quienes defendieron el territorio, indígenas que dieron su vida luchando contra el colonialismo español. Hoy el colonialismo extractivista sigue su apropiación sistemática y explotación de nuestros territorios y de la población para beneficiar al 1% más rico del mundo.
Rechazamos y condenamos el actuar del actual gobierno que se autoproclamó ambientalista, mientras permite que la Sociedad Nacional de Minería (SONAMI) ha divido el país en 14 distritos mineros, obviando los efectos de la industria indiscriminada y coordinando para incidir en materia de Sitios
Prioritarios y la implementación de la ley SBAP, con la estrategia de dilatar el acto administrativo de Sitios Prioritarios por tres años más.
También rechazamos y condenamos la Ley de Permisos Sectoriales (Ley de Permisología) que acorta las etapas y plazos del Sistema de Evaluación Ambiental (SEA), apurando procesos que evalúan los impactos en el medio ambiente y las comunidades. Así también las diversas políticas públicas como la Zonificación del Borde Costero, Sitios Prioritarios, Plan de Hidrógeno Verde, entre otros mecanismos, que solo buscan entregar al empresariado nuestra región.
Exigimos que las Consultas Indígenas y Ciudadanas sean vinculantes, que cumplan estándares internacionales y recomendaciones de organismos expertos en temas, que las metodologías de participación NO sean impuestas, ya que actualmente no son discutidas ni informadas y tampoco consideran la visión de los pueblos y la ciudadanía. Llamamos a los gobiernos locales a cuidar a la población por sobre los intereses económicos, somos la región más cara de Chile y somos quienes estamos siendo sacrificados por la avaricia de unos pocos.
El extractivismo colonial sólo conduce a la pobreza de los territorios y a las enfermedades del alma y el cuerpo. Las organizaciones ambientalistas de la Región decimos NO A LA EXPLOTACIÓN DEL SALAR DE ATACAMA HASTA EL 2060, NO AL MALTRATO Y SEQUÍA DEL RÍO LOA, NO A POLITICA DE TRANSICIÓN SIN REPARACIÓN SOCIOAMBIENTAL REAL, NO A LA CONTAMINACIÓN INDUSTRIAL DEL MAR, NO MÁS DESALADORAS QUE DEPREDAN LOS ECOSISTEMAS COSTEROS, NO A LA POLÍTICA QUE PROMUEVE EL HIDRÓGENO, NO A LA EXPANSIÓN DMH DE CODELCO.
Así también exigimos al Estado de Chile justicia y verdad para Julia Chuñil y para las y los ambientalistas perseguidos y asesinados por defender los territorios, para que el proyecto de ley que reconoce y protege a las personas defensoras del medio ambiente no se quede sólo en las buenas intenciones. No luchamos por intereses particulares ni privados, luchamos por la salud de los territorios y sus habitantes.
