
Valparaíso, 30 marzo 2021.- 16:13 pm
“Es una pequeña medida, pero vaya que es importante cuando el agobio del cobro de las deudas en plena catástrofe, entendiendo que ya no hay recursos suficientes, se hace cotidiano, constante o día a día”, sostuvo.
“Dejen de cobrar”. Así se llamó la campaña que inició la diputada y vicepresidenta de Renovación Nacional Paulina Núñez hace 10 meses y que finalizó este martes con la aprobación en Sala y envío a Ley del proyecto de su autoría para limitar la cobranza de deudas en estados de excepción constitucional.
La parlamentaria RN por la Región de Antofagasta -que hizo una alocución antes de la votación que terminó con 131 votos a favor y una abstención- recordó que “presentamos transversalmente esta iniciativa para que de una u otra forma en esta crisis, nos pudiéramos preocupar de la salud mental de las personas”.
“El que te agobien, cobrando excesivamente en épocas en que no estás pagando, no porque no quieras, sino porque no estás llegando ni siquiera a fin de mes , requiere de una regulación especial. Así, hemos logrado establecer límites a las llamadas telefónicas y acciones extrajudiciales de cobranza en general en un estado de excepción constitucional”, añadió.
La parlamentaria oficialista explicó que esta norma establece una modificación a la Ley de Protección de los Derechos de los Consumidores, es decir la Ley 19.496, donde se estableció que las empresas no pueden realizar llamados o visitas más de dos veces al mes estando en una pandemia.
“También quedó establecida la obligación de las visitas de tener un registro de las llamas y visitas que hagan, porque obviamente se les va a fiscalizar, y esperamos que la puedan cumplir”, agregó.
Finalmente, la diputada Núñez insistió en que “la insistencia de los cobros afecta la salud mental de las personas, que ya está muy afectada por la pandemia y queremos que esta ley sirva en algo para aminorar esa situación. Es una pequeña medida, pero vaya que es importante cuando el agobio del cobro de las deudas en plena catástrofe, entendiendo que ya no hay recursos suficientes, se hace cotidiano, constante o día a día”.