Martes, 13 julio 2021.-
(Bloomberg) — El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, nominó al fiscal general André Mendonça a la corte suprema, lo que lo convierte en el primer evangélico que podría formar parte del máximo tribunal.
El mandatario anunció su elección tras reunirse el lunes por la noche con el presidente del Supremo Tribunal Federal, Luiz Fux, y destacó la religión de Mendonça.
“Es extremadamente evangélico, es un pastor evangélico”, dijo Bolsonaoro a los periodistas. “Le dije que le hago una sola solicitud —y él dice que el trato está hecho—, que una vez a la semana comience la sesión con una oración”.
Bolsonaro había prometido desde hace tiempo nombrar a un juez evangélico a la corte suprema. La importante y creciente población evangélica del país constituye un pilar clave de la base de apoyo del presidente, que adquiere aún más importancia con la caída de su popularidad a mínimos históricos a poco más de un año de las próximas elecciones presidenciales y en medio de un escándalo por las vacunas.
Mendonça, de 48 años, se desempeñó como ministro de Justicia tras la renuncia de Sergio Moro. Será el segundo juez nominado por Bolsonaro. El primero, Kássio Nunes, fue respaldado por el poderoso grupo de partidos centristas en el Congreso y se consideró que ayudaría a Bolsonaro a apuntalar el apoyo en la legislatura.
“Agradezco a Dios por la vida y por la posibilidad de servir a mi país”, dijo Mendonça en un comunicado tras el anuncio de Bolsonaro. “Agradezco al presidente Jair Bolsonaro por su confianza, así como a los líderes evangélicos, a los legisladores y a todos los que me han apoyado”.
El nombre de Mendonça será presentado al Senado en unos días. Primero tendrá que pasar por una comisión de justicia antes de una votación en el pleno, en la que al menos 41 de los 81 senadores deberán respaldarlo. Si es confirmado, Mendonça ocupará el asiento que dejó vacante Marco Aurelio Mello, de 75 años, quien se jubila debido al límite de edad.
